Incorporan entrada de tarjetas de memoria y bluetooth, para conectarles parlantes sin cables. Las marcas de hoy conviven con las de ayer, como Winco y Victrola. Precios y detalles. 

En su plan de eterno retorno, el vinilo es el objeto analógico que eligieron los acumuladores de nostalgia para decorar sus vitrinas. Mientras en los últimos años las ventas de CD cayeron drásticamente por el efecto streaming, los discos de acetato no paran de girar. Como consecuencia de esta expansión, las nuevas bandejas tecnológicas llegaron para extender el impulso del vintage musical.

Entre las incorporaciones más sugestivas de estas bandejas 2.0, se cuenta la posibilidad de que, mediante una simple conexión USB, se puede digitalizar el chisporroteo de la púa cuando surfea sobre la pista. Y mientras algunos modelos graban los temas directamente a la memoria, otros requieren un puente USB entre el dispositivo y la computadora.

La característica que comparten casi todos los equipos, además de no admitir el control remoto, es el anexo de una conexión bluetooth para conectar parlantes de forma inalámbrica y realizar streaming. Y si bien la mayoría ya incluye un juego interno, disimulado en su armazón, está la posibilidad de alcanzar una mejor acústica y distribuir el sonido por todo el ambiente.

Según el informe anual de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI), la música en streaming representó un 38,4% de los ingresos del sector, mientras el vinilo aumentó un 22,3% a nivel mundial, abriendo la puerta al nuevo hardware. “El streaming es la realidad de hoy, todos tenemos música en nuestros teléfonos, esto hace que un equipo de audio sin bluetooth sea algo incompleto”, destacó Jose Waijman, director de Victrola.

Victrola VSC-550. Giradiscos con correa de 3 velocidades (33, 45, 78 RPM) con bluetooth para transmitir música de forma inalámbrica. $ 4.000.

Algunos fabricantes, dispuestos a explotar ese sentimiento vintage que trajo a los giradiscos de vuelta a la vida, metieron sus bandejas dentro de unas valijas compactas, enriquecidas con diferentes motivos, que sirven para transportarlas. Y si bien no es posible separar el instrumento del maletín contenedor, esta estructura le otorga una mayor amortiguación, en caso de golpes o sacudidas.

Los modelos más sofisticados incluyen una batería interna de litio, que le permite al tocadiscos funcionar sin ninguna dependencia eléctrica. Y si bien el mecanismo no tiene un gran gasto energético, si se utiliza la conexión bluetooth, el nivel de consumo se acelera, por lo que no es una mala idea tener siempre un enchufe cerca.

Panacom LP8804. Bandeja giradiscos de 33, 45 y 78 RPM. Parlante (2x1W RMS), lector USB / SD y batería interna recargable. Graba vinilo a Mp3. $ 5.500.

Al momento de tomar una decisión, habrá que considerar el tipo de conexiones incluidas. Por respeto al pasado, todas traen, además del bluetooth, una salida analógica RCA para sumar un amplificador de sonidos. Hay otros con entradas para USB y tarjeta de memoria MicroSD más un visor digital con control para archivos. A modo de complemento, están los que adjuntan una salida para auriculares.

En la espiral de costos, están los equipos para exquisitos -como House of Marley, Sony, Thorens, ION- cuyo brazo mecánico viene fabricado en una única pieza para mejorar la estabilidad, el chasis donde se apoyan los discos está amortiguado de las oscilaciones y trae varias púas de repuesto. Estos modelos con entrada para tarjetas y USB, rondan en los comercios los $ 15 mil pesos.

Gadnic TD33. Tres velocidades de reproducción 33, 45 y 78 RPM. Baffles incorporados, conector USB y ranura para memoria SD. $ 4.000.

A esta línea clásica se suman los modelos tradicionales -como Winco, Victrola, Crosley- que apuestan por un toque retro. En esta categoría, el precio depende de la cantidad de soluciones incluidas dentro del maletín. Los más completos vienen con reproductor de CD y casete, radio FM, grabador del vinilo a CD en formato MP3. Su precio arranca en los $ 3.000.

Con varios motivos que intentan captar la mística de los setenta, Panacom LP-8804 viene con un lector de USB y otro de tarjetas. Para convertir los vinilos a MP3 es necesario enchufar un cable USB que una el tocadiscos con una PC. Viene con una batería recargable de Litio para disfrutar del sonido sin cables.

Con un sonido limpio y una elegante maletín, la VSC-550BT de Victrola, que viene con bluetooth incorporado para reproducir música de forma inalámbrica. Otro modelo legendario Winco W406 que graba de modo directo desde el vinilo al soporte digital y viene en dos colores. (Fuente clarin.com)