Los colectivos de la empresa continúan sin circular en medio de denuncias de los empresarios por ataques y de una medida de fuerza de los trabajadores por falta de pago. Debido a esta situación el jefe comunal de Gral. Alvarado, Germán Di Cesare hará un reclamo formal frente a la Subsecretaría de Transportes de la pcia de Bs As para que intervenga en buscar canales de solución al conflicto.
Este lunes la semana comenzó en Mar del Plata con la continuidad de la medida de fuerza que llevan adelante desde el pasado jueves los trabajadores de El Rápido del Sud. De esta forma, se cumple el quinto día sin el servicio de los colectivos de media y larga distancia, en el marco de la retención de tareas iniciada por los trabajadores nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la paralización del servicio impulsada por la empresa a partir de denuncias en relación a ataques e incendios intencionales.
Cabe recordar que los servicios se encuentran paralizados por dos vías: por un lado, la empresaria, que tomó esa decisión y así lo comunicó a sus usuarios luego de que el pasado miércoles a la noche se incendiara un colectivo sobre la Ruta 11 y denunciaran que se trató de un ataque intencional, en el marco del conflicto vigente hace meses. La medida tomada por la empresa conducida por Eduardo Vecchio se produjo “hasta tanto las autoridades responsables garanticen las condiciones de seguridad necesarias para la continuidad del servicio”.
Pero además de esa situación -que es relativizada por la UTA, ya que desde el gremio señalan que el incendio en la unidad se produjo por un desperfecto mecánico- el conflicto tiene un componente salarial, ya que los trabajadores aseguran que todavía no cobraron sus salarios correspondientes a abril. Por eso fue que, justamente, desde el gremio iniciaron una retención de tareas en sus puestos de trabajo por tiempo indeterminado “en defensa de sus derechos y el cobro de los salarios adeudados”.
El conflicto que paraliza el servicio desde hace cinco días no es nuevo y, particularmente, tuvo su tramo de mayor gravedad a fines de 2018 con una serie de medidas de fuerza sucesivas a lo largo de lo meses, también por falta de pago. Sin embargo, el paro llevado a cabo en diciembre tuvo la particularidad de que un grupo de los trabajadores dijo no sentirse representado por la UTA e incluso acusó al sindicato de llevar adelante una maniobra para beneficiar a otro empresario. “La UTA está operando para que el dueño de la 25 de Mayo (Juan Inza) se haga cargo de la empresa”, apuntaron los trabajadores y desde la UTA posteriormente lo negaron.
En ese sentido, desde la empresa conducida por Eduadro Vecchio advirtieron, días atrás, que se hace muy complicado mantener los servicios en un contexto de tanta violencia. Pese a que Vecchio no quiso dar nombres, como sí lo hicieron los empleados el año pasado, el dueño de El Rápido del Sud admitió la existencia de “presiones del gremio para que la empresa se caiga y se la quede otro grupo empresario”.
